Zorneo, Amigo del Marqués de Sade y Tutor de Casanova.
Demonio gentil y amable en el trato con los humanos, al cuál resulta fácil convocar y no es precisamente exigente a la hora de pasar factura por sus favores. A diferencia de algunos de sus célebres pares, cómo Mefistófeles y otros que la tradición señala como los típicos "captores de almas", Zorneo sólo pide fidelidad y consecuencia en el camino elegido durante el breve lapso de la vida mortal, y se desentiende de todo acuerdo relativo a la trascendencia. Pero se afirma que hostiga en forma terrible al que no cumple con lo pactado, por lo que los expertos recomiendan prudencia a quien solicite su intervención: si se le pide talento, no será lícito desperdiciarlo en aras de la fama o el prestigio social; si se pide lujuria, se deberá ser incesante en la práctica de la depravación.
El Marqués de Sade y Giácomo Casanova, que figuran en la lista de sus adeptos más notables, fueron fieles al pacto pero no pudieron escapar a las condenas que la sociedad "justa" fija para quienes se atreven a transgredir las normas: pagaron con la cárcel, el exilio y una vejez maltrecha el delito de ser distintos en un mundo en el que todos aspiran a ser iguales.
DEJA TU SANGRE
Publicar un comentario