sábado, 17 de mayo de 2008

LA NOVIA DE CORINTO :: LEYENDA

Bajo el gobierno del emperador Adriano, en la época en que la cruz conquistaba Roma, tuvo lugar un hecho fuera de lo común. Se dice que en Tralles (Asia), una joven de noble linaje de nombre Filinnia -hija única y rica heredera- se enamoró de un sujeto de baja condición social llamado Macates. Como se puede entender, la boda era imposible, por lo que la pasión desbordada de la joven le llevó a escapar de la casa de sus padres para buscar a Macates. De este modo surgió una unión ilegítima entre los dos amantes que aproximadamente duraría unos seis meses, ya que Filinnia fue encontrada y secuestrada por sus padres, los cuales prepararon todo para llevarla de regreso a Corinto, de donde era originaria; pero ella desmejoró mucho desde que fue separada de su amante, perdió la voluntad, el apetito y la salud hasta que finalmente murió. Por tanto, en lugar del viaje de vuelta a Corinto, sus padres debieron hacerse de una cueva funeraria para depositar el cuerpo de su hija, la cual había sido cubierta con finas vestiduras.

Macates desconocía qué había sido de su amada, ya que todo se había manejado en secreto para evitarle el escándalo a la noble familia; sin embargo, a la noche siguiente de que Filinnia fue sepultada, el joven se disponía a dormir cuando la puerta de su habitación se abrió lentamente. Él se acercó con su lámpara y pudo distinguir a Filinnia, muy bien vestida aunque pálida y fría, mirándolo fijamente. Él corrió a tomarla en sus brazos, le hizo preguntas, se acariciaron tiernamente y pasaron juntos toda la noche, pero ella se marchó antes del amanecer mientras su amante dormía profundamente.
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En vida, esta joven tuvo una vieja nodriza quien la quería y le lloraba a menudo, y que tras la muerte de Filinnia le resultaba difícil conciliar el sueño, por lo que a veces se levantaba en una especie de delirio a rondar la casa de Macates. Algunos días después del reencuentro entre Macates y Filinnia, la nodriza hacía su enfermizo recorrido ya avanzada la noche, cuando notó luz en la habitación del joven por lo que decidió asomarse por las rendijas de la puerta: Filinnia estaba sentada a un lado de su amante quien la miraba en silencio y se entregaba a sus caricias.
La mujer corrió a casa de sus amos enloquecida por lo que había visto, despertó a la madre quien no le dio crédito, pero que ante tal insistencia decidió acompañarla. Para cuando llegaron a casa de Macates ya las luces estaban apagadas y todo se encontraba en silencio, pero un rayo de luna iluminaba la estancia y a través de la rendija de la puerta pudo reconocer los vestidos de su hija sobre una silla, y en la cama la silueta de dos personas que dormían.

La madre volvió aterrada a su casa y pasó el resto de la noche en llanto y al día siguiente regresó al domicilio de Macates para preguntarle al respecto, a lo que él le confesó que eso que se veían todas las noches. "¿Por qué negármela -dijo a la madre- si somos ya prometidos ante los dioses? y, abriendo un cofre, mostró a la madre el anillo y el cíngulo de su hija. "Me los ha entregado la última noche, jurándome no ser de nadie más que mía. No trate más de separarnos puesto que una promesa mutua nos une."
-En ese caso –dijo la madre- tendrás que ir a buscarla a su tumba. Filinnia ha muerto hace ya cuatro días, y sin duda se trata de una bruja o “stryga” que ha tomado su forma para engañarte; eres el novio de la muerte, mañana blanquearán tus cabellos, pasado mañana podrás también ser sepultado, y de esta manera es como vengarán los dioses el honor de una familia ultrajada.
Macates palideció y tembló al escuchar estas palabras. Y propuso a Carito, la madre de Filinnia, que llevase aquella misma noche a su marido, que se ocultaran los dos cerca de su cuarto y que cuando el fantasma entrase, él les haría una señal para prevenirles.
Así fue, los padres de Filinnia acudieron esa noche a la casa de Macates y él se acostó vestido, fingiendo dormir. La joven se desnudó y se acostó a un lado de su amado, cuando éste hizo la señal convenida. Los padres de Filinnia entraron a la habitación y lanzaron un grito al reconocer a su hija.
Filinnia entonces se levantó y, pálida y con una voz cavernosa, dice: "Oh, padres míos, ¿por qué envidian mi felicidad y me persiguen más allá de la tumba? Mi amor había violentado los dioses infernales, la potencia de la muerte estaba en suspenso… ¡tres días más y hubiera vuelto a la vida! Vuestra curiosidad cruel destruye el milagro de la naturaleza; ¡me quitan la vida por segunda vez!...".
Al terminar estas palabras cayó sobre el lecho inerte. Un hedor cadavérico invadió la estancia y ya sólo se vieron restos desfigurados de una joven muerta hacía cinco días.
Se dice que al día siguiente la muchedumbre fue a ver lo que había pasado y luego se trasladó a la tumba de Filinnia. La joven ya no estaba, pero fue hallado en el mismo sitio un anillo de hierro y una copa dorada que había recibido de Macates. Encontraron el cadáver en el cuarto de Macates, pero éste desapareció. Consultados los adivinos, mandaron éstos enterrar los restos de Filinnia fuera de la ciudad y hacer sacrificios a las Furias y a Mercurio Terrestre, conjuraron a los dioses manes y le hicieron ofrendas a Júpiter hospitalario.
Flemón, liberto de Adriano, quien fue testigo de los hechos, señala en una carta que fue necesario imponer su autoridad para calmar a la población, la cual estaba perturbada por los acontecimientos, y señala: "si juzgáis conveniente informar de esto al emperador, hacédmelo saber, con el fin de que os envíe algunos de los testigos de los hechos.
"Por sorprendente que parezca, como ya se menciona, este fue un hecho comprobado y que ha sido objeto de varios estudios, de los cuales se han ocupado ya los demonógrafos franceses de la Edad Media y posteriormente otros autores se han formado su propia opinión. Sobra decir que los demonógrafos le atribuyeron el hecho a una obsesión diabólica, pero en la actualidad hay quienes piensan que se trató de una letargia histérica acompañada de sonambulismo lúcido, por lo que los padres de Filinnia la mataron al despertarla y la imaginación del pueblo exageró todo lo demás. Como haya sido, este hecho trascendió y no deja menos que de causar asombro.

1 comentario:

  1. Trasteare un buen rato por aqui buscando relatos tan nteresantes como este, sean ficcion o realidad...

    Saludos!!!

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